Guadalajara, Jalisco.- Las dos orejas que cortó, una en cada turno, acreditaron al novillero tapatío Axel López, como el triunfador del serial de primavera que concluyó en El Nuevo Progreso de Guadalajara, sus alternantes, Morales Ramos y Jesús Sosa, también pasearon un apéndice cada uno.
En su primero, Axel se sobrepuso al revolcón que le provocó “soñador” de Arroyo Zarco, novillo difícil, rebrincón y que avisó al espada más de una vez hasta que lo prendió de la taleguilla sin mayores consecuencias que el susto y la adrenalina con la que López volvió a la cara de su enemigo.
Había cubierto el segundo tercio con solvencia, pero después del incidente las fuerzas del novillo no duraron mucho, Axel se sacudió el instante de drama y logró muletazos para someter al astado, tras una estocada en buen sitio, el publico no dudo en solicitar vistosamente la oreja que otorgó el juez.
En su segundo, invitó a Morales Ramos a cubrir el tercio de banderillas, los tendidos aplaudieron el buen quehacer de ambos novilleros, con la muleta, Axel aprovechó lo que tuvo dentro “desafiante” de San Fernando y tras una faena decorosa, otro hábil espadazo convenció a la mayoría del respetable para solicitar otra oreja, que finalmente significó ser el triunfador del festejo.
Por su parte Morales Ramos rozó un triunfo importante. A su primero le cortó una oreja después de resolver la embestida de un novillo con codicia y al que tuvo que aguantarle mucho cuando fue perdiendo gas.
Pero su segundo, fue otra historia. Saltó al ruedo y de inmediato fue reclamado por su presencia, “campero”; resultó ser un novillo noble y con claro recorrido por ambos pitones, entregado iba y venía para regocijo del espada y de la clientela que se animó a murmurar la posibilidad del indulto.
Morales Ramos también lo creyó, se pasó de faena en la espera de una señal desde la presidencia y cuando el biombo ordenó despachar al novillo, se le vino la noche encima, dos espadazos defectuosos y cuatro golpes de descabello fueron necesarios para finiquitar al cerraplaza, la mejor faena del festejo, concluyó en vuelta al ruedo para el joven coleta tapatío.
Jesús Sosa cortó una oreja al segundo de su lote, recibió a porta gayola a “rorro” de San Fernando, uno de los mejores ejemplares del encierro.
Cuando el tlaxcalteca dibujaba un quite por gaoneras, sufrió un puntazo en una rodilla que lo disminuyó para su labor con la muleta, pese a todo le puso voluntad, inició con cuatro pases de rodillas, pero su labor se fue diluyendo; los tendidos exigieron una muleta más poderosa que no apareció del todo, despachó de hábil estocada para que la autoridad concediera una oreja; división de opiniones y arrastre lento al novillo con calidad, que fue, el cuarto de la tarde.
Al final del festejo, la Peña Mal de Montera, entregó el galardón “Montera de Plata” a Axel López que salió a hombros del ruedo tapatío.