Miguel Aguilar fue el triunfador de la primer novillada sin caballos, celebrado este domingo en la Plaza México al cortar una oreja y lidiar el sexto toros de la tarde, mientras que Juan Pedro Llaguno se mostró desenvuelto y dispuesto para interpretar y lograr contactar con el público.
El primer festejo de la temporada novilleril, presentó a los españoles Juan Pedro García Vizcaíno “Calerito”, y Francisco Manuel Ramírez García quienes como alumnos de Escuelas Taurinas Españolas, dejaron ver su poca adaptación el toro mexicano, por lo que se mostraron desconfiados.
Sin embargo los novilleros mexicanos sacaron partida en esta presentación ante una gran corrida de Los García que envió seis toros bien presentados para recibir el arrastre lento el tercero de la tarde.
Así que al final los mexicanos Juan Pedro Llaguno y Mario Aguilar se han podido mostrar. Llaguno en su primero derrochó voluntad y entrega en una faena ante un ejemplar con cierta violencia y raza, al que hubo que aguantarle, y así lo hizo sin perder la forma. Lamentablemente pinchó y perdió los trofeos.
Con su segundo es decir el Quinto de la tarde dejó claro que ha crecido mucho, teniendo el potencial. Cuando se ajustó ligo derechazos de mucha valía que prendieron al público por la raza y bravura que proyecto el burel.
Por su parte Miguel Aguilar en su primero cortaba una oreja en una labor muy digna que le dio la posibilidad de torear al sexto de la tarde. Ya que libró la batalla bajo la lluvia.
Ya con el sexto, su labor tuvo mucho mérito ya que lidió no aún novillo, sino prácticamente a un toro castaño, albardado de bonitas hechuras.
Es así que vino la creación toreando con mucha clase ante un ejemplar que exigía en donde torearle. El olé rompió en la México pero al final la espada no venía filosa y perdía la oreja y cambio recibió las palmas del público.
El ruedo de la México lució renovado, se derribaron los techos de ciertos burladeros como el de la empresa, doctores, y ganaderos. Además la pared blanca dentro del redondel, quedo color rojo y la tribuna quedó sin publicidad estática que por años ahí se veía.
